AHORA RESULTA QUE MI BLOG NO AYUDA A LA REVOLUCION

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Mi nombre: Daylan Graelles Méndez, nací el 31 de julio del 1979, en el municipio Esmeralda, Camaguey, donde resido actualmente. Soy Licenciado en educación, en la especialidad de Matemática e informática. Actualmente soy Maestrante en Enseñanza de la Matemática, en una Maestría de Excelencia de la Universidad de Camagüey.  Trabajo como profesor en la sede universitaria municipal de Esmeralda.

A través de este post, el último desde mi puesto de trabajo, les informo que en el día de ayer, martes 15 de abril del 2014, recibí una visita de la alta dirección (o una parte de ella) de la Universidad de Camaguey “Ignacio Agramonte y Loynaz” de la cual soy profesor.
Resulta que el tema de la visita volvió a ser lo que escribo en mi blog.
Debo confesar que el ambiente de discusión o intercambio fue con total diplomacia a pesar de prevalecer o intentar hacer prevalecer el criterio de que mi blog no ayudaba a la Revolución.
No valen de nada las palabras cuando se viene con una idea elaborada. No valió hablar y exponer mi actitud hacia la Revolución, sus líderes y su proceso de cambio, cuando se intentaba que yo fuera “menos pasivo” ante los comentarios “ofensivos” que prevalecían en los post que yo escribía.
Es cierto, y lo reconocí, que todo el que comenta en mi blog no lo hace para ayudar al cambio que se quiere, sino con ánimos de destrucción de lo que se ha logrado; y es que ahí es donde radica la verdadera democracia: la de escuchar a todos estén acertados o no con nuestra ideología.
Me exigían que tenía que dar respuestas a esos comentarios, que verdaderos o no, aparecían como ola en mis artículos, y que yo no arremetía como ellos.
Varias veces les recordé que defender a la Revolución desde diferentes puntos de vistas no quiere decir que no estemos del mismo lado. Ellos, acorde a su adoctrinamiento y educación, la defienden a su manera y no entienden que hay que escuchar a los que están en contra de la Revolución para saber los criterios que tienen y saber enmendarlos.  Ellos creen que doy pie a que la gusanera se revuelva y utilice mi blog como una plataforma para desacreditar a la Revolución y a su maravillosa obra.
Les aseguro que más que nervioso por la visita, me quedé desanimado.  No hubo manera de convenserlos de que mi blog es de debate, de escuchar lo que TODOS tiene que decir a favor o en contra del sistema. Que así se puede tener una idea de cómo se piensa y de qué perspectiva se tiene de un asunto determinado.
Al final  fui sancionado por la seguridad informática de la universidad por violar  el código de ética y utilizar la cuenta de internet para “asuntos personales y no de interés profesional”. De nada sirvió que yo le preguntara si revisar el facebook, estar en redes sociales o simplemente leer los blog, cosa que está permitida en la universidad de Camaguey, no era también usar la cuenta con interés personal; y eso lo hace todo el que tiene una cuenta de internet en la universidad.
Sobra decir que no tuve respuesta para esa pregunta. Que solo se limitaron a decir que mi blog no ayudaba a la Revolución.
Conclusión: Con la suspensión de mi acceso a internet por un año o hasta por tiempo indeterminado (aún no me llega la sanción) no puedo acceder a mi blog desde mi puesto de trabajo. Debo hacerlo desde un Joven Club. Es por eso que pido paciencia a los que leen mi blog porque ahora los artículos demorarán más. Pero de una cosa pueden estar seguros: ¡SEGUIRÉ ESCRIBIENDO!







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